El pasado lunes realizamos otra
de las experiencias que teníamos ganas de hacer desde hace tiempo: censar un día
completo la Ensenada de Llodero y ver como varían las cantidades de aves
acuáticas cada hora. Podéis ver el resultado aquí.
La cosa está animada porque
estamos en pleno paso de limícolas (ver fotos de Iván). Sigue el ostrero joven
(ver foto de Iván). Como es normal en estas fechas, llegan las agujas
colipintas, todas jóvenes (ver foto de Iván).
Desde hace más de una semana
permanece 1 zarapito trinador, una hembra de 1º verano (ver foto).
Casi todos los correlimos son
juveniles: zarapitín, tridáctilo y común (ver fotos de Iván). Pero aún se ve
algún común adulto (ver foto).
Algunos chorlitejos grandes deben
venir de muy lejos, pues ya se ven juveniles con las cobertoras alares
desgastadas (ver foto de Iván). Entre los adultos, los hay con rasgos de la
raza Ch.h. psanmodromus (ver fotos de
Iván y David) y alguno similar a Ch.h
tundrae (ver foto).
Al igual que ocurrió la semana
pasada con el andarríos bastardo en La Llera, 3 andarríos grandes recalaron
también allí (ver foto de David), cuando lo usual es que paren en la charca de
Zeluán.
Pasan las primeras espátulas (ver
foto de Iván). Siguen por aquí los somormujos lavancos (ver foto de Iván).
De gaviotas, hay 2 jóvenes
Patiamarillas con el ala arrastras por la ensenada desde hace una semana (ver
foto). Las adultas de esta especie ya casi acabaron la muda postnupcial, y
ahora es normal verlas con las cabezas listadas (ver foto de Iván). Algunas
están sucias, como les pasa a nuestra pareja amiga de gaviones. Mingo, el
macho, mudó ahora a inv., y tiene algunas listas oscuras en el píleo y las
manchinas negras del pico más grandes (ver fotos).
De pajarinos, Roberto nos envía
una foto del torcecuello que hubo por aquí hace una semana. Estos días
vimos
otro alcaudón dorsirrojo.
Entre los insectos, registramos
la primera mantis de la temporada (ver foto). Lo que no está en temporada aún
es la maduración de algunos frutos, como el madroño (ver foto), ya que debe
arrastrar el retraso fenológico de un mes que impuso la pasada primavera
lluviosa.
Las noticias de contaminación no paran, fiel reflejo
del degradao ambiente en el que vivimos: LVA1, LVA2, LVA3.
El verano se acaba, pero no lo
hacen las molestias: aún hay bañistas (ver foto de Fran); lo de los perros
sueltos es inenarrable, máxime cuando se trata de un vecino con el que ya
tuvimos palabras (ver foto de Fran); y hay fotógrafos habituales que deben
pensar que son tan guays que los observatorios no son para ellos (ver foto).
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